Una noche Li y Lu no podían dormir, entonces la mamá comenzó
cada noche a contarle una aventura. Aventura en la cual participaban los niños.
9 de diciembre. Li gana un viaje con su familia para viajar
en un crucero.
Esa misma noche la familia se embarca en el crucero más
bello a la vista de los niños y todos.
La luna se alzaba bella y hermosa, las
estrellas titilaban en el cielo.
Una noche tan bella e iluminada, a los pequeños se le
comenzaron a cerrar los ojitos, papá y mamá tomo a cada uno en brazos y los llevo a su
camarote; les dieron el beso de las buenas noches y salieron en silencio. Los
papis quedaron un poco mas contemplando la belleza del cielo.
De repente las olas comenzaron a agitar, un viento se
levanto y aquel espectáculo de belleza quedo oscuro, viento, lluvia, granizo…
Parecía como que el Dios de la tormenta se había enfurecido
terriblemente.
Niños y Padres se reunieron, colocándose el salvavidas.
Todo fue tan rápido el crucero se hundió, los niños junto a
sus padres quedaron flotando en el agua.
Amaneciendo, de repente el padre grita -¡tierra, tierra!-.
Li gritaba y lloraba tengo hambre decía, Lu que era como un
corderito gritaba quiero leche, -¡mamá quiero leche!-.
Habían llegado a una isla. Comenzaron a recorrerla, era hermosa, tenía todo tipo de frutos
buenos, mas adelante había una cascada, desembocaba en un hermoso lago
cristalino y todo eso tenía desembocadura en el mar.
Pablo y All, que así se llamaban los papas de los niños,
inmediatamente se enamoraron de la isla, decidieron construir una choza.
Los niños pidieron para recorrer la isla, mientras sus
padres buscaban material para construir la que sería su casa, hasta que
apareciera un barco.
Los niños juntaban frutas y de la cascada traían
agua fresca,
esta era dulce, podían tomar.
De repente para asombro de ellos en el agua aparecieron dos niños.
Al verlos se pusieron felices, niños con
los cuales jugar. Li les pregunto sus nombres: la niña se llama Yenny y su
hermano Jhon.
Li y Lu prometieron volver a jugar con ellos después de
dejarles las frutas y el agua a sus
padres.
Como todo niño el jugar es su mayor prioridad. Los ojitos de
Lu y Li se iluminaron al llegar junto a sus padres estos habían construido una
hermosa cabaña.
Pidieron par a ir a jugar después de cenar, pero estaban tan
cansados que se durmieron, al otro día los niños se despertaron muy temprano y
decidieron ir a la cascada para ver si se encontraban con los dos pequeños que
habían visto el día anterior. Y para sorpresa de ellos , allí estaban. Jugaron
largo rato…Hasta que de repente Li lanzo un gran grito de terror, algo bajo el
agua la toco.
Jhon y Lu se reían, pero Lu es pequeño, y ver la cara de pánico de su hermana salió inmediatamente del agua.
Fue ahí cuando Yenny le dijo no te asustes -¿puedes guardar
un secreto?- Li asentó con la cabeza. Fue entonces que Yenny y John confesaron
su verdadera apariencia, ella una hermosa sirena y él un hermoso tritón.
Li que siempre creyó en las sirenas y las hadas quedo maravillada.
Le confesó a su nueva amiga que sus
sueños siempre fue ser sirena, que ama permanecer en el agua por mucho tiempo.
Cuando los niños regresaron a la cabaña les contaron a sus
padres lo que vieron, los padres no les creyeron, sabían que sus hijos tenían una
gran imaginación.
Los días pasaban y los niños siempre con historias
maravillosas de las aventuras que tenían con sus nuevos amigos.
Un día All, comenzó a observar y poner atención en cada
palabra que salía de su pequeñas bocas… decidió seguirlos, así que le dijo a Pablo -¿vamos a la maravillosa
cascada que inspira tanto a los niños?-.
All que le gustaba escribir le encantaba las historias de
sirenas, de mar, piedras mágicas que los niños contaban.
Así que cuando Pablo y All llegaron, su sorpresa fue mayor,
no solo se encontraron con dos niños sino que también con sus padres, una
hermosa sirena de cabellos rojizos y cola rosa, con toques dorados y su pareja
un tritón de tez clara, cola verde también con toques dorados.
Ellos al verlo se sorprendieron. De a poco se fueron
acercando, conociendo, entrando en confianza; al punto de hacerse grandes
amigos todos.
La mama sirena se llama Rebecca y su esposo Xavier.
Un día Li y Lu le llevaron una invitación a sus padres y se
preguntaban cómo le iban a hacer, no podían respirar bajo el agua, y para no
quedar mal con ellos esa tarde fueron a contestar su invitación, allí en una
roca alta vieron a Rebecca sentada,
moviendo su hermosa cola, los rayos del sol hacia brillar aquel hermoso color
dorado que tenia.
Cuando Pablo y All se acercaron a Rebecca ella les entrego una pulsera mágica, a Li y All, Xavier le entrego a un anillo mágico, a Lu y Pablo.
El poder de estas joyas consistía en que ellos tenían que
pedir desear ser sirenas y tritones, y en el momento con el contacto con el
agua su deseo se hacía real.
Pablo y Lu se convirtieron en hermosos tritones color
celeste, su cola con toques dorados. Li y All son unas hermosas sirenas, sus
colas de color rosa suave y toques dorados.
“Era el sueño de Li hecho realidad”
No existía en el mundo una niña más feliz que ella…
Las dos familias se fueron nadando al mar, contemplando la
belleza de este, los corales, los peces,
praderas de hierbas marinas, etc-
Hasta que por fin llegaron a un hermoso palacio bajo las
profundidades, un palacio de coral. Al entrar Li y Lu quedaron maravillados.
Las dos familias cenaron, conversaron contando cada una sus historias, sus
vidas.
Luego Yenny y Jhon se fueron a sus recamaras Li y Lu ya
cansados se durmieron en los brazos de sus padres. Rebecca y Xavier los
acompañaron fuera del agua.
Al salir del agua volvieron a tener pies.
Desde ese momento las dos familias se reunieron, todos los
fines de semana, fue como una tradición cenar con Rebecca, Xavier y los niños.
Gusto tanto el lugar, que llegaron 3 cruceros a la isla, y
ningún miembro de la familia quiso dejar la isla. Decidieron hacer ahí, su
lugar, su hogar.
“Y colorín colorado este cuento se ha acabado”
Fin
Allison Panizza
2012
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