Porque navegar sin encontrar el puerto. Me
llamas y me pides que vuelva, pero tu ya no estas.
Atacas a mis sentimientos y me haces
retroceder; tu no estas para abrigar a mi corazón, para besar mis labios, para
sostenerme porque…
Eres un fantasma, travieso que recorre mis
sentimientos puros y verdaderos quemando un amor, quemando la verdad. Párate un
momento, tranquilo; si no vas a regresar porque me aniquilas con un mirar, un
mirar claro, un mirar delicado, un mirar ya no existente, pero que siempre está
ahí.
En ti el amor es una cosa que no se puede
ocultar, si no lo dicen tus labios se dilata tu mirar. Déjame ir.
El cielo se abre ante ti, las tinieblas te
aclaman oh! Di tu nombre, déjame ser un pájaro libre, para volar, deja que
encuentre un nido.
Mi partir es como el de un ave solitaria,
que planea su vuelo sobre un cielo claro en el cual en las alturas tus pupilas
se dibujan y bajo tu mirada estoy.
Cuantos años han pasado, tú no olvidas y
no permites que yo te olvide, todo el tiempo trato de huir de tu mirada, en tu
presencia me muestro fría e indiferente, pero no crees en mi actitud. Entonces
tu contemplas mis labios en los cuales posaste los tuyos una vez, esos ojos en los
cuales te inclinas para leer en el fondo de mi alma, aquella mirada, antes
apasionada y tierna, ahora indiferente y fría y ver que nada de esto te
pertenece ya.
Yo siento con solo mirarte que te
preguntas: -¿que despecho de apodero de ella?-.
Detente por favor no acabes con mi vida,
mis presentimientos perseguidos por amargas reflexiones no llegan a ningún
punto.
Quisiera decirte que ya no se encontrara
mis ojos con los tuyos, pero no es cierto ya no se endulzara junto a ti mi
dolor.
Pero hacia donde vaya llevare tu mirada.
Pero hacia donde camines llevaras mi dolor.
Allison Panizza
19/07/2000
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