viernes, 16 de agosto de 2013

ADOLESCENTE VICTIMA DEL ABUSO


  
                                                                



ADOLESCENTE VICTIMA DEL ABUSO




En las afueras de una  ciudad del interior, en una chacra, vive la familia Smith.
Es una familia de clase media, baja.

El ambiente era cálido. En el comedor se encontraba la familia Smith.

El señor Jorge Smith de unos 45 años de edad, de complexión delgada, con grandes entradas en la cabeza, leía el periódico.

La señora Mercedes de Smith de unos 40 años, su fisonomía es de una mujer gorda, sumisa a todo lo que dice su marido, cosía unos calcetines.

Su hija Julieta, de unos 18 años, rubia, ojos azules, 1,72 de estatura y unas medidas mareantes, 105 - 64 - 96. Sus pechos eran grandes y duros no necesitaban de sujetador alguno para mantenerlos erguidos desafiando todas las leyes de la gravedad, el vientre perfectamente plano su cinturita era deliciosa seguida de unas caderas rotundas las cuales albergaban un par de nalgas carnosas, duras y respingonas propicias para el manoseo, a estas seguían unas piernas dignas de figurar en un museo de estatuas Griegas, eran como dos columnas perfectamente talladas, largas y torneadas.
Estudiaba, sentía que  su papá se la quedaba  viéndola desde su sillón donde leía el periódico, de una manera bien rara y hasta se puede decir que algo extraña.

Jorge es todo un buen caballero muy bien educado, que siempre trató con mucho afecto, a su hija.

Pero desde que ella alcanzó la pubertad, el posó los ojos en su pequeña.
Se obsesionó de tal manera en ella que un día, una tarde gris y lluviosa en la cual Mercedes tomaba una siesta, se sentó frente a ella y le pregunto si la madre ya le había hablado sobre sexualidad.

La joven respondió que lo esencial, entonces le explico
que es el sexo, que es la sexualidad, erotismo y amor.

El sexo para que, que pasa en el cuerpo del adolescente, generalidades, las transiciones, que pasa en el cuerpo de ellos, los caracteres sexuales, que pasa en la persona del adolescente, que preocupa a los jóvenes en relación con su sexualidad, que preocupa a los adolescentes en relación con su cuerpo, las expresiones sexuales en los adolescentes, la masturbación, las fantasías sexuales, las caricias, las relaciones sexuales, las conductas homosexuales, la educación sexual, y otras.


Hasta que en una ocasión en que Mercedes se fue de viaje por unos días le dio a conocer en la practica todos los secretos del amor. Empezó explicándole con mucho tacto, todo lo referente a la sexualidad y como hombres y mujeres se amaban.

Comenzó frente a ella a masturbarse, a lo cual la muchacha se puso muy nerviosa y no sabia que decir o hacer frente a tremenda situación.

Suavemente comenzó a acercarse le, a estimularla, coloca sobre su mano la de el para que lo estimule, sus lagrimas recorrían sus mejillas suavemente sin que el lo notara, palidecía…

Con su sexualidad aun dormida, el comenzó estimulándole el clítoris, vagina, y los pezones.

El procuraba al principio que no se produjera estimulación exigente, intentaba que ella lo disfrutara porque el hace mucho tiempo lo deseaba.

Su dolor en el alma en su corazón, su padre aquel hombre que ayer fue su ídolo, su protector,  hoy se convierte en un ser horrible. El miedo y pánico la dejan mas rígida, al notar la situación, el, que si lo esta disfrutando pone todo su empeño, quiere de todas maneras que su hija sienta placer, ese placer que el esta sintiendo.

Decide estimularla oralmente,

Le advirtió que ella nunca debía decir nada a su madre sobre esto, ni mencionárselo a ningún miembro de la familia, o a extraños, ni siquiera a su mejor amiga.

Jorge le decía a Julieta que el iba a hacer de ella una muchacha feliz y que supiera hacer feliz al hombre que algún día fuera su esposo.
Jorge tomaba todas las precauciones necesarias para que ella no fuera a quedar embarazada, físicamente nunca abuso de ella, pero a medida que
Julieta crecía, se fue dando cuenta de que era abusivo lo que su padre hacia con ella.

En primer lugar Jorge distanció a Julieta un poco de su madre, ella no era la pequeña que le contaba todo a  su mamá. Más bien se sentía su rival, y sabía que guardaba con ella un secreto muy grande.


Muchas veces tuvo que disimular con su madre, que ella ignoraba cosas que en realidad conocía perfectamente, y aunque Jorge nunca la dejo de querer, con el tiempo noto que en sus furtivos encuentros le procuraba mas placer que el que el sentía con su madre.

Julieta estaba segura de que a Mercedes, nunca le hizo algunas cosas que el le enseñó a ella.

Un día vino Narella la mejor amiga de Julieta, eran amigas de la infancia. Narella le contaba a Julieta del viaje que hizo a Jamaica y conoció un muchacho con el cual tuvo una aventura amorosa.

Le contaba que un día fueron al cine y miraron una película porno para avivar su deseo sexual.

Luego lo llevo a la casa de sus tíos, aprovechando que los tíos no estaban, comenzaron con mimos caricias y tuvo su primera vez  con el: -Déjame amiga que te cuente como fue:

Estábamos los dos solos, abrazados, como siempre quise estar con alguien, tantas veces soñé con ese momento y ahora lo estaba viviendo.

El me miro y sonrío, yo hice lo mismo, sus ojos me dan tantas cosas al mismo tiempo... su cara se acerco a la mía, muy lentamente. Me beso tierna mente.

Fue un beso corto pero rico. De nuevo me mira a los ojos y acaricia mi mejilla - Me dijo que me ama – Julieta no sabes cuanto lo amo yo a el-.

Volvió a besarme, con más pasión, su lengua se puso entre mis labios como pidiendo permiso para entrar. El beso se volvió más apasionado, y  me abrazo de la cintura, y yo lo tome por las caderas. No dejamos de besarnos por un buen rato.

-Hay amiga sus besos me matan-

Le sonreí y lo abrace, así permanecemos, sin decirnos nada. Después nos sentamos en el sillón, donde siempre nos gusta estar. El me vuelve a besar,  y poco a poco la pasión crece de nuevo y se va recostando encima de mí.

Baja con sus labios a mi cuello y oigo un suspiro mío, sigue, yo me dejo besar por el. Acaricia mi mejilla y empieza a desabrochar mi blusa, me ve a los ojos y me pregunta -"¿Quieres que siga?""Siiii" le respondí.

Me acaricia los pechos por encima del sostén, yo cerré los ojos, sus manos buscan la manera de desprenderse de mis prendas que estorban para hacer lo que quisiéramos.

Quedo sin nada, en un momento besó uno de mis pechos, mientras el otro lo acaricia con su mano, el placer que siento es indescriptible y el también lo disfruta. Al poco rato paro de besar mis pezones, yo le quito su camisa y paso delicadamente mis manos por su pecho, nuevamente me sonríe y yo le respondo con una sonrisa.

Me besa en los labios, es un beso hambriento, al sentir el contacto de su piel con la mía, me recorre un escalofrío por todo el cuerpo.

Me desabrocha el jeans, lentamente los baja. Acaricia mi pierna con sus dedos. Y después de esto soy yo la que le quito el pantalón, y puedo ver que se excita, sin decirle nada, lo toco y el cierra los ojos suspirando.

 Beso su pecho y bajo a quitarle su bóxer y tomo su miembro con una de mis manos, puedo sentir que la temperatura en su cuerpo ha aumentado. Se que no es la primera vez que el hace esto, pero yo si.

 Sentí que ese era el momento, y el era el indicado, aun lo siento. Sin dudarlo un momento pongo mis labios sobre su pene, ya erecto…… Soltó un gemido, y eso me incito a seguir, continuo y el tomo mi cabeza, la mueve para indicarme que tan rápido quiere que lo haga, y yo le sigo. Unos segundos después me dice "Para ya, amor"

"Eso que hiciste, estuvo bastante bien...gracias" Me dijo al oído"
Vuelve a besarme y baja por mi estomago, llega a mi vientre, lo besa. Yo muevo mis caderas, como diciéndole que debe apresurarse.

Delicadamente, abrió mis piernas y con sus dedos me acaricio, esa parte de mi cuerpo, que jamás  nadie,  toco.

Siento su respiración, y lo que siento después me hace volver loca, siento su lengua recorriendo todos los rincones de mi vagina, lo hace tan delicadamente que siento como si estuviera siendo acariciada por una cálida brisa, pronto aumenta la velocidad, mis gemidos crecen y llenan la habitación, no puedo dejar de mover mis caderas.

Es tan dulce me pregunto si ya estaba -"¿Lista?" -"¡Sí!... si… si…ya...ya no aguanto más...hazlo"

Cuando siento la dureza de su pene en la entrada de mi vagina, comencé a sentir un escalofrío en mi columna, lentamente comienzo a penetrarme,   -hay me duele…- esta es mi primera vez le dije.

Siento un poco de dolor, bastante dolor, grite un poco, el me consoló con un beso en los labios y dejo de moverse, cuando mi vagina se acostumbra, me muevo un poco hacia arriba, y puede sentir como entro más en mi, y comenzó a penetrarme una y otra vez, primero suave y luego mas ligero, el dolor cesa, el dolor, se convierte en  placer, el placer que tanto he soñado sentir.

 Hasta que llega el momento que ninguno de los dos aguantamos mas, “suenan bombos y platillos”, el se vació dentro mió, aaahh que felicidad.

Nos besamos tierna mente. Cuando acabamos de sentir aquél intenso placer, nos seguimos acariciando, nos quedamos sintiendo  el calor de nuestra piel. No por mucho tiempo, los tíos  podían llegar de un momento a otro.

Julieta la oía atentamente, pero se daba cuenta de que su amiga, no tenía un amante tan experto y conocedor como su padre,

Fue en esa época que Mercedes tuvo un accidente automovilístico, y quedo parcialmente inválida.

Jorge se preocupo mucho por ella, pero Julieta sigue creyendo que el le tenia un profundo cariño a su madre, pero en el aspecto sexual, ella, era la que realmente deseaba.

Una tarde se sentó a tomar el te, y se puso a pensar para si… que todavía se siente avergonzada cuando recuerda, que si bien el accidente de su madre le hizo sufrir mucho, porque su padre y ella tendrían entonces mas libertad para amarse sin despertar sospechas.

Pero ahora piensa que hubiera sido preferible que su padre tuviera sus aventuras extra matrimoniales, con otras mujeres y no la hubiera seducido a ella.

Después que termino el secundario empezó a trabajar y a salir con jóvenes de su misma edad.

Jorge lo sabia y en una ocasión noto que hacia esfuerzos, por disimular sus celos.

El todavía la deseaba y aunque de tarde en tarde, seguían amándose. Ella recuerda que un día el le dijo en un tono triste, “Bueno, he hecho todo lo que pude para enseñarte a ser feliz en la vida” y pareció estar convencido de ello.

Julieta ya es una muchacha casada 32 años, y tiene una hija de seis años, a la cual ella y su esposo, le están enseñando todo lo que es necesario, para buscar las felicidad en sus vidas, pero sin que hayan reservas mentales entre ellos.









Epilogo

Julieta supone que algunos pensarán que su caso fue una envidiable excepción. Pero no es así. Julieta dice que hay muchos padres que maltratan a sus hijos y algunos abusan de ellos dañándoles física y emocionalmente, nada de lo cual le sucedió a ella; pero de todos modos, por muy armoniosa que sea una relación sexual entre padre e hija, algo precioso se destruye en el corazón de la familia: el afecto y la confianza mutua entre todos sus miembros.

Julieta conoció el placer sexual mucho más joven de lo que va a ser su hija Nara cuando lo conozca…. Pero el precio fue demasiado alto.

(Caso de la vida Real, se cambiaron los nombres para no revelar su identidad)





Allison Panizza.
/12/1990

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